El
día 8 de Mayo de 2013, a eso de las 8:30 horas de la mañana, nos dimos cita los
alumnos del Aula de Naturaleza de Alcorcón para realizar el viaje de fin de
curso.
El
destino seleccionado el impresionante paraje del Parque Natural del Alto Tajo;
situado en el interior de la Península Ibérica, concretamente entre el sureste
de la provincia de Guadalajara y el nordeste de la provincia de Cuenca.
En
el año 2000 se crea el Parque Natural que consta con 105.721 hectáreas, más otras
70.544 hectáreas de zona periférica de protección, comprende 44 municipios y
además es zona ZEPA, LIC y pertenece a la RED Natura 2000.
Todas
estas medidas de protección legislativas, recogidas en la ley 1/2000 de CLM,
velan por la protección de un paraje natural singular en cuanto a su geología y
en concreto a una litología muy particular de sus terrenos secundarios y
cuaternarios donde se localizan calizas, yesos, areniscas y arcillas que dan
esa tonalidad rojiza tan característica.
Los
terrenos compuestos por materiales relativamente blandos han sido esculpidos a
lo largo del tiempo, por el protagonista de este escenario el río Tajo, que ha
creado grandes cañones y hoces, como en toda buena película, el protagonista
debe ir acompañado por buenos actores secundarios, como no podía ser de otra
forma el Tajo recibe las aguas de importantes ríos afluentes como por ejemplo:
el río Gallo, Hoz Seca, Linares y Ablanquejo, entre otros.
El
río Tajo, nace el Fuente García a 1593 metros de altitud, en la Sierra de Albarracín
(Teruel), perteneciente a los Montes Universales que forman la rama occidental
del Sistema Ibérico.
Sus
1008 kilómetros hacen del majestuoso río Tajo el más largo de la Península
Ibérica, del total de su longitud 816 kilómetros atraviesan territorio Español,
cuatro son las Comunidades Autónomas que ven pasar sus aguas: Aragón, Castilla
La Mancha, Madrid y Extremadura y 6 son las Provincias las que riegan sus
huertas con las aguas del Tajo: Teruel, Cuenca, Guadalajara, Madrid, Toledo y
Cáceres.
La
cuenca hidrográfica del río Tajo cuenta con una extensión de 80.600 kilómetros
cuadrados, lo que le hace ser una de las más importantes fuentes hidrográficas
de toda la Península Ibérica.
Sin
duda alguna nuestra elección no pudo ser más acertada, visitar el Alto Tajo es
todo un viaje al interior del centro de España donde grandes tesoros esperan
solo para aquellas personas apasionadas por la naturaleza.
Tras
abandonar la comodidad de la carretera de Barcelona N-II, a la altura de
Alcolea del Pinar, nos dirigimos por la N-211 dirección Molina de Aragón, al
pueblo de Torremocha del Pinar, el cual atravesamos con ciertas dificultades
debido a la estrechez de sus calles.
Una
vez salvadas todas las tejas de los tejados de las casas del pueblo, nos
encontramos con una estrecha y deteriorada carretera que se adentraba al
interior del bosque, la sensación de que el autobús necesitaba más espacio del
que la carretera nos ofrecía en varios puntos era evidente, pero la pericia del
conductor salvo todas las dificultades del viaje, al final de la angosta
carretera desembocamos en la carretera CM-2015, mucho más ancha por la cual
circulamos disfrutando del paisaje y de los diversos corzos que divisamos desde
el autocar.
La
carretera CM-2015, ofrece una panorámica espectacular de toda la zona, es una
de esas carreteras donde merece la pena reducir la velocidad y disfrutar de las
vistas y de las maravillas que nos brinda el Alto Tajo.
El
puente que cruza el río Tajo con el nombre de puente de San Pedro es el punto
donde estacionamos el autocar e iniciamos nuestra ruta.
Nada
más bajar del autobús escuchamos el murmullo de las cristalinas y verdosas
aguas del río Tajo que nos dan la bienvenida, tras recoger nuestras
correspondientes mochilas y estudiar los diferentes carteles y mapas que
existen en el propio aparcamiento nos ponemos en marcha.
El
puente de San Pedro, tiene una variante para los vehículos y otra para los
peatones, por lo tanto es muy agradable iniciar una ruta cruzando el puente que
nos facilita cruzar y observar el río, compañero inseparable durante toda la
ruta.
Tras
ubicarnos correctamente, lo cual nos llevo un tiempo y varios pasos de un lado
a otro del puente, recorrimos unos 1000 metros por la propia carretera CM-2015,
dirección Zaorejas, según caminamos a nuestra derecha nos encontramos con lo
que se denomina edificio travertínico, producidos por la acumulación de tobas
calcareas.
La
carretera desierta nos facilito el transito hasta una curva donde divisamos
unas vistas panorámicas de todo el cañón, en esa misma curva se pueden observar
oquedades en los cortados con curiosas formaciones, incluso para construir la
carretera tuvieron que realizar un corte en el terreno dejando al descubierto las
caprichosas formaciones que llevan a cabo las tobas.
Nada
más dejar atrás la curva a mando izquierda perfectamente señalizada sale la
pista que tomamos para realizar la senda.
La
dificultad que presenta la ruta en cuanto a desniveles es baja, la gran
dificultad se encuentra en la distancia de la misma, ya que es una ruta lineal
de 27 kilómetros de distancia de ida y otros tantos de vuelta, por lo que es
aconsejable llevar un podómetro para calcular la distancia que vamos
recorriendo y así ajustar correctamente el tiempo que deseemos caminar.
Una
vez más las vistas son magnificas y al mirar a lo alto de los cañones uno tiene
la sensación de encontrarse en mitad de una película del Oeste donde en
cualquier momento la hilera de indios va hacer acto de presencia.
La
vegetación más característica del Alto Tajo es la siguiente: pino laricio, pino
silvestre, pino rodeno o resinero, brezos, jaras, sabina albar, enebros,
tomillo, cantueso, sabina negral, cambroños, quejigos, avellanos, encinas,
bojes, endrinos, aligustres silvestres, tilos, sauces, álamos, juncos y algún
árbol frutal asilvestrado como manzanos que encontramos en algunos puntos del
camino en plena floración.
En
cuanto a la fauna que alberga el Alto Tajo podemos destacar la siguiente:
garduña, tejón europeo, nutria, zorro, gato montés, comadreja, hurón salvaje,
gineta, jabalí, ciervo, corzo, gamo, liebre, conejo, ardilla roja, erizo,
musaraña, ratón de campo, desmán de los pirineos, murciélago pequeño de
herradura, entre otros mamíferos.
Respecto
a la avifauna: buitre leonado, cernícalo, gavilán, halcón peregrino, ratonero,
azor, alimoche, águila calzada, águila perdicera, águila culebrera, águila
real, milano negro, alcotán, búho real, mochuelo, cárabo, autillo, lechuza
común, arrendajo, pito real, urraca, rabilargo, trepador azul, chotacabras, martín pescador, totovía y un largo etc.…
Las
especies piscícolas que acogen las cristalinas aguas del río Tajo y sus afluentes son la trucha común, el barbo común, el barbo comizo, boga, locha espinosa, lucio
y bermejuela principalmente, en el cauce del río Tajo podemos encontrar
pequeños reductos donde aún sobrevive el cangrejo de río ibérico.
Los
reptiles están representados por la culebra de escalera, culebra viperina,
víbora hocicuda, lagarto ocelado, lagartija colicorta, lagartija ibérica,
lagartija colilarga, salamanquesa común y culebrilla ciega.
Los
anfibios más destacados son la rana común, sapo común, sapo corredor y
gallipato.
Y
los insectos más llamativos que podemos encontrar son: cenagriónido, caballito
del diablo, mantis, mariposa isabelina y ciervo volante.
Lo
que nos ofrece el Alto Tajo es mucho y mientras caminamos pudimos ver en vuelo
a buitres leonados y a un halcón peregrino.
La
senda es muy agradable aunque es recomendable hacerla en primavera y en otoño,
debido a la falta de sombra en casi toda la totalidad de la ruta, una opción
muy recomendable es hacerla en bici.
Tras
llevar algo más o menos de una hora caminando llegamos hasta la “Cascada de la
Escaleruela”, un impresionante salto de agua, que recibe este nombre por su
perfil escalonado.
Esta
cascada es un enorme toba, que se formo gracias al agua de la lluvia que fue
filtrándose entre el suelo poroso, disolviendo poco a poco la roca calcárea de
la zona, el agua al llegar a un nivel del subsuelo que es impermeable no puede
seguir infiltrándose por lo que busca una salida al exterior en forma de
manantial, es en este proceso cuando el carbonato cálcico disuelto en el agua
va precipitándose y formando la toba, que con el paso del tiempo va cubriendo a
la vegetación y a las rocas colindantes con una costra blanquecina.
La
formación de la toba se ve favorecida por la presencia de musgo, hojas y tallos
de algunas plantas, a las que llega a cubrir con una costra blanca, con el
tiempo los restos vegetales se descomponen y queda en la roca el molde del
resto sobre el que se formo, dando origen a curiosas formaciones.
Tras
realizar las correspondientes fotos proseguimos nuestra ruta aguas arriba,
asomándonos con cierta frecuencia a los barrancos para observar el fluir de las
turquesas aguas de río Tajo.
Sin
casi darnos cuenta tras andar unos 6 kilómetros llegamos un merendero provisto
de mesas la cuales aprovechamos para realizar la comida, cada uno de los
participantes aporto una gran variedad de especialidades culinarias caseras al
igual que embutidos, quesos y vinos de la zona de cada cual.
Este
tipo de comidas ofrece la oportunidad de probar una gran variedad de sabores,
texturas y condimentos al igual que al ser una comida más informal la
sociabilidad aumenta exponencialmente, por lo que es muy recomendable.
Otra
de las ventajas de comer en el campo es que la comida te sabe diferente y
existe la posibilidad de que aparezcan ciertos invitados sigilosos pero no por
ello pasan desapercibidos, como fue el caso de varios trepadores azules que se
dejaron ver bajando por los troncos de
los pinos cercanos a las mesas, para ver lo que les podíamos ofrecer.
Una
vez repuestas las energías retomamos la pista aguas arriba para caminar durante
un par de kilómetros donde localizamos una zona de piedras muy propicias para
darse un baño, pero decidimos dejar el baño para el verano y darnos la vuelta
para volver por nuestros propios pasos.
Mientras
regresamos entre tertulia y tertulia nos imaginamos el duro trabajo que
desempeñaban las personas que realizaban el oficio de ganchero, que se
dedicaban a bajar los troncos de los árboles cortados por las aguas del río Tajo
hasta Aranjuez y Toledo.
Poco
a poco regresamos al punto de inicio sin dejar de alzar la vista para grabar en
nuestras retinas las impresionantes formaciones geológicas de la zona, las
rocas del Parque Natural del Alto Tajo, pertenecen a las siguientes eras,
periodos y tipos:
Geológicamente el Alto Tajo supone todo un desafío donde poder encontrar una gran variedad de tipos de rocas, como son: pizarras, cuarcitas, dacitas, areniscas, conglomerados, arcillas, yesos, margas, calizas, dolomías, arenas y tobas calcáreas.
Tras dejar la pista retomamos la CM-2015 para volver al autobús situado en el Puente de San Pedro, antes de subir al autobús no pude evitar echar un vistazo a una amplia tabla de agua que hay justo delante del puente donde las aguas del gran río Tajo descansan antes de caer por un pequeño salto de agua.
Llego la hora de volver, esta vez cogimos la CM-2015 hasta la población de Corduente desde donde enlazamos con la N-211 y siguiendo por esta carretera llegamos hasta la carretera N-II y de ahí hasta Alcorcón.
Para tod@s los que realizamos el viaje fue una experiencia muy agradable donde descubrimos y compartimos juntos vivencias que forman ya parte de nuestros recuerdos inolvidables.
Si ustedes también quieren descubrir el Alto Tajo y desean hacerlo con el acompañamiento de un guía pueden ponerse en contacto conmigo escribiéndome a: danielmedioambiente@gmail.com
ERA:
|
PERIODO:
|
TIEMPO:
|
TIPO DE ROCAS:
|
CENOZOICO:
|
CUATERNARIO:
|
Actualidad - 2 millones
de años.
|
Arenas y conglomerados
|
MESOZOICO:
|
CRETÁCICO:
SUPERIOR:
CRETÁCICO:
INFERIOR:
JURÁSICO:
TRIÁSICO:
|
65 - 205 millones de
anos.
|
Areniscas, conglomerados,
arcillas, yesos, calizas, dolomías, arenas caoliníferas.
|
PALEOZOICO:
|
PÉRMICO:
SILÚRICO:
ORDOVICIO:
|
250 - 490 millones de
años.
|
Pizarras, cuarcitas y
rocas volcánicas.
|
Geológicamente el Alto Tajo supone todo un desafío donde poder encontrar una gran variedad de tipos de rocas, como son: pizarras, cuarcitas, dacitas, areniscas, conglomerados, arcillas, yesos, margas, calizas, dolomías, arenas y tobas calcáreas.
Tras dejar la pista retomamos la CM-2015 para volver al autobús situado en el Puente de San Pedro, antes de subir al autobús no pude evitar echar un vistazo a una amplia tabla de agua que hay justo delante del puente donde las aguas del gran río Tajo descansan antes de caer por un pequeño salto de agua.
Llego la hora de volver, esta vez cogimos la CM-2015 hasta la población de Corduente desde donde enlazamos con la N-211 y siguiendo por esta carretera llegamos hasta la carretera N-II y de ahí hasta Alcorcón.
Para tod@s los que realizamos el viaje fue una experiencia muy agradable donde descubrimos y compartimos juntos vivencias que forman ya parte de nuestros recuerdos
Si ustedes también quieren descubrir el Alto Tajo y desean hacerlo con el acompañamiento de un guía pueden ponerse en contacto conmigo escribiéndome a: danielmedioambiente@gmail.com
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